Desde que comenzó el otoño, el producto del que hoy os quiero hablar ocupa la mayoría de marquesinas de nuestro país. Muchas ya os imaginareis a qué me estoy refiriendo. No es ni más ni menos que el nuevo Shalimar de Guerlain. Un perfume que la Maison Francesa vuelve a lanzar para rememorar una época dorada como fueron los míticos años 20, y es que fue precisamente en 1925 cuando se lanzó esta fragancia.
El entusiasmo y admiración que este aroma despertó, hoy continua intacta. Convertida en objeto de leyenda, Shalimar regresa, 85 años después, dispuesta a transmitir la experiencia olfativa y emocional de aquella época, manteniendo esas notas que la hacen tan deseable.
El perfume se trabaja en torno a cuatro materias muy apreciadas por los maestros perfumeros de Guerlain:
- La rosa Centifolia, propia del mes de mayo.
- El lirio de Italia que se presenta empolvado, chic y que transmite infinita suavidad.
- La vainilla suave y afrodisíaca
- El haba tonka: capaz de aportar su sabor de especia y almendra. Apetitoso e irresistible.
Todo ello se presenta en un frasco irresistible, tentador... Conserva todos los códigos del perfume inicial. El tapón en el color del zafiro, una banda de seda que adorna la esencia y una borla de color gris azulado simulando la pluma de un cisne.
El color del perfume refleja la suavidad empolvada, la caricia, convirtiéndose en el símbolo de la confidencia de todos aquellos secretos que conservamos en un rincón de la habitación.
PVP:
Vaporizador 40 ml: 54 euros
Vaporizador 60 ml:75 euros
Vaporizador 100 ml: 106 euros.
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